Trucos para reducir el consumo de los electrodomésticos

¿Sientes que el pago de tus facturas te significa un gasto de dinero que podrías utilizar en otras necesidades? ¿No sabes cuál es el electrodoméstico que más te consume energía? ¿Sientes que no estas ayudándole al planeta? Si esta es tu situación pon atención a los trucos para reducir el consumo de los electrodomésticos que Energy Intersolar te enseña.

Para nadie es desconocido que los electrodomésticos de nuestro hogar son los que más incrementan el valor de nuestra factura de la luz. Sin embargo, es poco el conocimiento que se tiene sobre el uso eficiente de los mismos, no solo para ayudar al planeta sino para no ver afectadas nuestras finanzas personales.

Fíjate en la etiqueta energética, así podrás reducir el consumo de los electrodomésticos

Si te estas planteando adquirir un aparato y deseas hacerlo en condiciones ventajosas fíjate bien en los que te vamos a enseñar a continuación:

Todo electrodoméstico viene de fábrica con una etiqueta energética que marcará A, B, C, D, E Y F siendo “A” un electrodoméstico más eficiente y “F” menos eficiente. Dicho dato nos permitirá identificar el consumo de energía anual que puede tener el aparato electrónico.

¿Cómo podemos identificar si un equipo es eficiente? Todos los equipos contienen una etiqueta energética que marcará su categoría: “A” la más eficiente frente a “F” como menos eficiente, lo que nos permitirá conocer el consumo de energía anual que puede tener el aparato.

El objetivo de la Comisión Europea es facilitarle a los usuarios la elección de aparatos que consuman menos energía y de esta manera se ayude al medio ambiente.

Cómo ahorrar energía con los electrodomésticos de casa

  1. Evita el consumo fantasma o en stand-by

Teles, ordenadores, equipos de música… apagarlos en lugar de dejarlos en stand-by puede ahorrar hasta un 10% de todo lo que consumes. Unos 75 € para un consumo medio (3.500 kWh/año). Recomendamos usar regletas para apagarlos todos a la vez, e incluso puedes adquirir unos modelos denominados “inteligentes” y que son capaces de detectar si el aparato principal está en stand by (por ejemplo, un ordenador). En ese momento lo que hacen es apagar el resto de aparatos que estén conectados a la misma en ese momento (altavoces, pantalla, impresora, etc).

  • Lava en frío

Es importante que revises la temperatura con la que programas tus electrodomésticos. Por ejemplo, lavar la ropa en la lavadora a 30º o menos en lugar de 60º puede ahorrar hasta un 60% de energía.  No te olvides tampoco de limpiar el filtro de manera periódica.

  • Carga al máximo tus electrodomésticos

Cuanto mas aproveches un mismo ciclo de lavado o de secado para procesar tus artículos, menor consumo total tendrás, ya que además de optimizar los consumos (al meter mucha carga en el mismo ciclo) habrás evitado ciclos adicionales que eran innecesarios.

  • Lavavajillas, utiliza el programa ECO

Por lo menos un 20% lograrás ahorrar en luz y un 16% menos de agua respecto del programa normal si utilizas el programa ECO en el lavavajillas. La desventaja es que tendrás que esperar una hora más. Es clave verificar que los niveles de sal y abrillantador de tu lavavajillas son los adecuados y limpia el filtro con regularidad.

  • Secadora, atento si vas a planchar luego

Todos los modelos de secadoras cuentan con un programa interesante en caso de que deseemos retirar las arrugas con la plancha. Por un lado facilita el planchado al dejar la ropa con más humedad, y por otro, reduce el consumo de energía en un 25%. Además, no te olvides de limpiar el filtro de pelusas y del condensador.

  • El frigorífico

Regula bien su temperatura del frigorífico es fundamental para ahorrar luz y dinero: entre 3 y 7º para el refrigerador, si no tienes carne o pescado, y de -20 a -18º para el congelador. Trata de tener la puerta cerrada en lo posible y limpia la escarcha del frigorífico: 2 mm aumentan el consumo un 10%.

  • Aire acondicionado con bomba de calor

Si utilizas el aire acondicionado para calefactar tu casa en invierno, puedes realizar la aireación a primera hora de la mañana durante 5 minutos abriendo las ventanas, pero luego mantén bien cerradas las puertas y ventanas. Utiliza el modo ECO, que ahorra cerca del 30% de energía, y no olvides limpiar los filtros al menos una vez al año.

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